Los meses de primavera son ideales para depurar el organismo, partiendo de una mejora en nuestra alimentación diaria. Aunque a veces no parezca tan sencillo modificar estos hábitos, hoy te traemos 5 simples consejos para que llegues al verano con un cuerpo deshinchado y en plena armonía.
1- Elegí alimentos ricos en fibra
Despejá la cocina de los alimentos chatarra, incluyendo las galletitas y las papas fritas. Cualquier producto de harina blanca como el pan, la pasta y el arroz deben quedar en segundo plano. Tu cuerpo tiene que trabajar mucho más para digerir estos productos, ya que carecen de bondad nutricional y enzimas vivas. Optá siempre por opciones ricas en fibra tales como panes integrales, quínoa, arroz integral, cereales y pastas integrales o trigo sarraceno.
2-Activá el consumo de nueces, semillas y granos
Comer legumbres, nueces y semillas, así como ensaladas crudas y verduras cocidas al vapor, ayudan naturalmente a los procesos de limpieza del organismo. Consumir brotes generará que las semillas y granos tengan más enzimas y otros nutrientes. Reducí el consumo de carnes rojas -eliminar las carnes procesadas por completo- y comé más platos vegetarianos.
3- Reemplazá el café de la mañana por un batido
Esto ofrece altos niveles de nutrientes importantes y potentes antioxidantes a las células, aumentando los niveles de energía y promoviendo nuestra salud. Los batidos verdes tienen la ventaja de ser altos en fibra, ayudando a la función intestinal, a controlar los niveles de colesterol y a que te sientas satisfecha por más tiempo.
4- Abastecete de verduras frescas
En los menúes diarios, no te olvides de agregar ensaladas con variedad de verduras de hoja verde y hierbas frescas. Y si podés acceder a alimentos orgánicos mucho mejor, ya que aportarán menos pesticidas y otros productos químicos para tu hígado.
5- Comé estas súper frutas de estación
Seguramente tendrás tus frutas favoritas, pero nosotros te recomendamos el mango, la papaya, los arándanos y las cerezas, ya que cuentan con altos niveles de antioxidantes, vitamina C y betacaroteno. Refuerzan nuestras defensas y ayudan a prevenir el daño de los radicales libres. Las enzimas de la papaya mejoran la digestión de proteínas, los mangos pueden ayudar a aliviar la inflamación y regular los niveles de azúcar en la sangre, y las cerezas y arándanos poseen poderosos agentes que luchan contra el cáncer.
Tip Saludable
Ahora ya sabés cómo una buena alimentación puede ayudarte a tener un cuerpo saludable y en armonía!
